"Los senderos que recorría no sólo me conducían hacia
colinas y ciénagas, si no también hacia mi interior. (...) Con la creciente
fuerza de algo esencial que se crea así mismo a partir de un sustrato
ancestral, me vi frente a un apasionado y firme anhelo interior. (...) Tomar la
senda y no mirar atrás. Una hoguera en el horizonte, un rastro en la nieve,
mostrarían hacia dónde había ido."
John Haines
Incendia los caminos de huida
existe un mar de miradas al que dedicar la vida
vuelve a los campos
ama a los caballos
siente la lluvia que os empapaba entre trigo verde y olivos
vuelve a sentirla cada vez que te venza el asfalto
lanza el corazón como una estrella fugaz contra el vacío
contra su silencio de sabiduría lejana y hazlo parte de ti.
En este exacto segundo siéntete feliz de estar aquí
de todo lo aprendido hasta llegar a éste punto.
No olvides las realidades humanas compartidas desde tu bata
adolescente.
En los meses de la gran bisagra
del giro de esquemas hasta resquebrajarse su inflexibilidad
fragmentarse en cientos de ecos como un zumbido de moscas
atosigando, ahogando el alma
la duda aguda del miedo
la duda del anhelo
la de la nostalgia
la de lo que estaba claro que iba a ser
y por supuesto... no fue.
En el suelo te descansa una sombra
la silueta del espíritu nómada
sé cuánto temes estar matándolo a razones.
Te veo llorar cuando te abres caminos a machete
para hacer de la anarquía natural de la selva
el hogar del ser adulto y formal
como si ser adulto fuera amputar la parte más auténtica de
tu ser.
Has agarrado una etapa inmensa de tu piel y la has escondido
en el interior de una colmena
te refugias en la miel ámbar del pasado
te riegas con las salvaciones cotidianas de tu tribu, son tu
gran amor.
Aunque te refugias en soledades tantas veces, sonríes de
tanto que les quieres.
En 1997 comprendiste que existía el tiempo.
Adéntrate desnuda en la noche del bosque que te enseñó
que tras romperse la idealización amas la realidad.
Deja de ahogarte en temores cuando te enamoras
y dile cuántas veces te llenó de una risa nueva,
de un oxígeno que salvaba el pulmón de tus libertades
de tus más salvajes y profundas verdades.
Lennon, yo también me declaro ciudadana de Nutopia.
Pachamama tiene más alas que todo nuestro enjambre de
aviones.
Baila siempre eléctrico.
Cuida el amor que sobrevive en cada camilla.
Escucha cómo a todos nos crepita dentro un fuego
susurrando la búsqueda de las bellezas puras del mundo.
Deja el miedo
que el planeta entero está explosionando vida
y el latido colectivo está cantando
abrázalo suave que te percuta dentro su verdad.
Fdo: GLPD
No hay comentarios:
Publicar un comentario