señor de las
cumbres,
seca hasta el
infinito de tus vistas.
¿Por qué le has
dejado tan solo mientras te llamaba?
Él pidiéndote tus
alas
Anhelando tus nieves
Imaginando la
realidad que tu observas desde tus cimas
Soñando ese mundo
desplegándose entero ante sus ojos
Lo soñaba desde su
pedacito de suelo enmarañado de limites
Una luz que pudiera
liberarle
Encontrar su canción
y con ella viajar por su mente dispuesto a curar cada brecha de dolor
Estar tras el humo
de misterios que sale del interior de los instintos
Cada día mantuvo
abierta esa mirada suya tan grande
La mantuvo dentro de
cada tormenta tragándose la electricidad de sus soledades
Su espeso silencio
se dejo acariciar
Tantas filosofías
como mentes
Defiendes
peleas
cada gramo de daño
escrito en plural
Te silencias
cada piedra de daño
escrito en singular
A nadie le gusta
desenterrar sus muertes
Y la inocencia es
una piel a flor de alma
Juega a salvarte en
el equilibrio que orbita los polos extremos
Las mareas aparecen
con las lunas
Juegan con los
tobillos de las costas
Empapan la barca
abandonada demasiado cerca de la orilla
Está sola la barca, madre,
está sola
Está viva la barca,
madre, viva exhalando salitre
Dime
¿Quién puede
entender la vida?
Dime
¿Quién no va a
querer seguir intentándolo?
La muerte es un
misterio en el que apoyamos incansables los pensamientos
Como ramitos de
violetas disecadas
Y la vida...
Dime
¿Quién puede
entender la vida?
¿Y quién no va a
querer seguir intentándolo?
Descansábamos dentro
de un huevo a oscuras
Alguien encendió la
luz
Rompió la cáscara
Nos iluminó la cara
Y cada uno hicimos
lo que mejor supimos.
A donde nos
dirigimos...
Prefiero llevarte conmigo
mientras la fiesta continúe
Dime
¿Quién puede
entender la vida?
¿Y quien no va a
querer seguir intentándolo?
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